Reventando el globito
Ya pasados los días, aparece la presentación del abogado Víctor Bahamondez al Tribunal Electoral del Maule en donde con detalle expone los motivos de inhabilidad que el nuevo rostro de la política provincial (SIC) candidato Boris Duran -electo CORE por Curicó- presentaba al momento de la elección.
Dos de las causas expuestas en la presentación son:
- 5 de septiembre de 2013, Conducción en estado de ebriedad. Rancagua.
- 15 de octubre de 2013, Conducción en estado de ebriedad. Licantén.
El paso al costado
Independiente de las conclusiones que pueda tener el Tribunal Electoral Regional del Maule, nos enfrentamos a un caso en donde reiteradamente un ciudadano contraviene una regla que todos debemos respetar. Entendiendo que hay que ser -más allá de solo parecer- me parece que el paso correcto es hacia el costado, asumiendo la falta y el costo de no respetar una de las tantas reglas que nos hemos dado como sociedad. Los primeros que debiesen respetar las normas son quienes ostentan la autoridad, más aun cuando es obtenida por vía “democrática”.
Sumado a lo anterior, la representación pública exige también eso: “representar”. No únicamente de ser portavoz de algo, sino de ser en el espacio de lo público un ejemplo a imitar. ¿Qué tenía de ilegal el vínculo Clinton – Lewinsky? realmente nada, la ilegalidad no es el mínimo, el punto es que el deber de los primeros entre sus iguales es servir de espejo en donde mirar. Todos somos humanos, pero no es excusa y menos a semanas de la elección.
Como ya he hablado de la mezcla entre alcohol y decisiones, la conducta abre espacio a la pregunta de si su estado etílico se mantendrá durante las decisiones que impliquen, por ejemplo, decisiones acerca del presupuesto regional. ¿Qué peso político tendrá en tales condiciones? ¿Dará mayor fuerza a la provincia o, por el contrario, medrará posibles apoyos en definiciones que nos afectan?. Por cierto, esto debiese ser más generalista y ante cada elección debiésemos elevar el estándar, exigiendo examen de pelo a cada candidato. Sorry, pero los vicios privados pueden llegar a afectar el espacio público.
Fragilidad del sistema
En la presentación aparece que el sistema no conocía del incumplimiento, entendiendo que la presentación de antecedentes no tenía fallas. Aquí es donde se abre la opción a preguntar cuántos de los actuales candidatos tenían irregularidades que por no contrastar, pasaron coladas. Ojo, hablo de candidatos a lo largo de todo el país ya que si no hay mayor contraste interno por parte de los garantes del proceso, malamente podrán dar como válidas todas las opciones pensando que cada candidato es per se honesto.
El responsable en el partido
Disculpen mi falta de credulidad, pero no veo posible que nadie de su partido estuviera al tanto del comportamiento mostrado en meses previos a la elección. Cabrá pues, esperar la declaración pública que debiese entregar la directiva local acerca del hecho y qué sanción tendrá tanto el postulado como quienes estuvieron al tanto y mantuvieron silencio ante el partido y la ciudadanía que creyó.
Y en una ciudad tan pequeña, donde todos nos conocemos, parece raro que tampoco en los otros partidos no se hubiese filtrado la noticia. ¿”Complices pasivos”?
Los medios
Como ya es recurrente, al final de cada post va la invitación a pensar en el rol de los medios de comunicación local y cómo intermedian en la esfera pública. ¿¿Otra vez se nos pasó??
Disculpen, nuevamente, mi falta de credulidad.
Ahora, que ya el tema aparece a viva voz, el pudor mínimo debiese exigir regular o bajarle al festín radial, ya que pudieron haber anticipado toda esta situación, por lo que también les cabe responsabilidad. ¿No supieron?. Un simpático “uyuui” o un “cuec” no les exime.
Por si no lo notaron, nos damos cuenta.
Tu, qué opinas?
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