Más allá de que cada día sea una nueva oportunidad, en el caso de la administración de la ciudad este extenso ciclo de 12 años ya llega a su fin. En menos de un año elegiremos a las mentes que guiarán el destino de la comarca por los próximos 4, 8 o 12 años.
En consistencia con el desafío, uno esperaría algún tipo de plan, una visión, una propuesta, el sueño de ciudad que cada candidato o candidata desea plantear. (Asumamos por un minuto que cada candidato de forma honesta y sincera desea realmente ser alcalde). Entonces, de ser cierto aquel noble deseo, uno esperaría algo mejor que una media plana.
Media plana.
Recuerdo una vez algún candidato a la alcaldía que su mejor aproximación a “un plan” era una lista de supermercado en media plana, con ideas sueltas, que suponemos era su mejor diagnóstico de temas por abordar. No le fue mal, llegaría a diputado.
La legislación exigió que, en el caso del nivel regional, quien postulase entregara un documento con su propuesta… la experiencia fue bien precaria en el caso del Maule, con varios documentos de nivel escolar.
Estamos a menos de un año de las elecciones municipales 2024 y ya contamos una decena de candidatos: al menos 4 desde el concejo (Núñez, Ahumada, Sanz, Canquil), 3 “ex” (Morales, Bordachar, León), 2 por primera vez (Drews, Moraga) y si, solo faltó don Leo. Qué decir del listado de concejales -y “ex” concejales- en campaña eterna.
Hemos visto pasar algunos anuncios de ese “plan” en edición. En otros casos suponemos que están “al aguaite” de cómo se desencadena la situación, destraban autorizaciones y generan pactos.
Aún sin plan para revisar, los videos cortos (lives) de candidatos –cada cual con más comprometidos anhelos y preocupaciones– ya andan dando vueltas por redes. Lo preocupante en realidad, es que apuntan a cualquier lado menos a visiones de ciudad o propuestas de futuro.
¿Realmente pintar los graffitis estará dentro de las 10 primerísimas prioridades de la ciudad?
¿Es que la gente considerará como uno de los grandes temas la habilitación (o no) de alguna Planta de Revisión Técnica?
¿Algún plan de acción climática para abordar el impacto en la comarca?, ¿Ideas para dejar de disputar el primer lugar nacional en muertos por siniestros viales?, ¿Abordar el desempleo por automatización agroindustrial?, ¿Migración y gestión territorial? Y ojo, que aún no llego a los que supuestamente serían las primerísimas prioridades, como Delincuencia, Salud, Educación y el largo etcétera.
Ahora, esto podríamos considerarlo como un problema de tiempos, sobre todo en los que se integran a estas lides, pero para los electos y reelectos parece ser más cuestionable. Por eso decía al comenzar que un supuesto importante es asumir que aquellos que dicen querer ser candidatos a alcalde, realmente quieran serlo. Esa media plana, en su momento la alertamos como un jugador que no estaba jugando realmente.
¿Entonces, qué?. Por eso quizá el primer llamado sea a tener candidaturas responsables tanto con un plan de futuro como con una auténtico afán por jugar en serio y no solo lanzar globos sonda, una masiva encuesta pagada por todos.
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