Que no lograremos resultados distintos volviendo a hacer lo mismo, resuena hasta el hartazgo en época de elecciones. No quiero hablar de la elección presidencial, donde no se opta por una reelección. Quiero centrarme en dos roles centrales en la creación de legislación, definición de recursos nacionales y regionales y, por cierto, de fiscalización en mirada regional como lo son las elecciones al congreso (diputados) y al nivel regional (consejeros). ¿En qué ha cambiado la región o los dos distritos gracias a diputados y consejeros en ejercicio en estos últimos 4, 8 ó 12 años? Disculpen si parece agresiva la pregunta, disculpen también si parece muy acotada al limitarla solo a 12 años, ya que bien podríamos mover el alcance hasta 30 ó 40 años. El semblante regional ha tenido cambios, efectivamente, pero más por fuerza natural (terremoto de 2010 y pandemia), fuerza global (globalización y ahora irrupción China en curso) y esfuerzos privados (negocios o avance desde lo privado). Ante cada uno de estos cambios nuestras joyas han llegado tarde, mal y nunca. Aún no recuperamos lo perdido en 2010 donde se encuentran pendientes hasta monumentos nacionales, nuestros campos se defienden solos de la irrupción asiática y de la presión por la expansión urbana, y por pandemia ya vimos el despliegue que consistía en mirar hacia Santiago y aplicar. ¿Ese escenario es el que queremos reelegir otra vez?.
Aterricemos un poco más el asunto. Desde Valparaíso en el ágora parlamentaria, de los 7 diputados actuales, 3 van por la reelección en Distrito 17, ya que otros 3 quedaron bloqueados por ley en el juego de reelección infinita (entre ellos sumarán 48 años en el congreso) y el restante se cansó de cantar parece. En este nivel, de aporte a lo nacional, seguiré insistiendo que se podía liberar la válvula que (nos) explotó en la cara, con cuestiones tan básicas como permitir la iniciativa ciudadana de ley, o la apertura a presupuestos participativos. ¿Dónde estuvieron nuestros preclaros legisladores? Definiendo visionarios horizontes como el de hacer que la propaganda fuera biodegradable o luchando para ojalá dar rango olímpico al rodeo. Porque para salir vestido de huaso si hay tiempo y voluntad. No profundizaré en la acción fiscalizadora cuando ni existe y debemos soportar cada cierto tiempo otro desaguisado municipal que no se descubrió desde su potestad. No nos pisaremos la capa entre superhéroes, es la fórmula. Por el contrario a lo dicho, fueron uno más de la comparsa guiada por el stablishment santiaguino que definía la música y la agenda. Pero vamos al dato duro por si lo anterior no fuera suficiente: en estos 4 años, de los 248 proyectos que los 3 aspirantes han presentado a la fecha, sólo 16 han llegado a puerto, dando una efectividad de un 6%…, si, en 4 años. Si, de a 4 éxitos por año. La sequía llegó también por aquí. ¿A esto queremos seguir apostando?.
A nivel regional, venimos de una elección inédita que no solo definió a una nueva gobernadora, sino también, en el proceso, develó una cruda realidad. La obligación de elaborar y cargar planes de acción ante la pasada elección en curso, mostró la feble visión de los no electos en cuanto a la región y sus desafíos. Mamarrachos digitales algunos de ellos. Si un aspirante al más alto rol electo en el plano regional genera ese tipo de propuestas, me queda claro cuál será el nivel de un escalón más abajo, vale decir, la actual elección a consejeros. Podemos omitir las faltas de ortografía o el relleno con fotos conmovedoras, pero ¿la osadía de dar una vuelta más?.
Baste darse una vuelta por Talca y luego por cualquier otra comuna de la región, para entender dónde estuvo la prioridad. Mientras, hace un par de jornadas por Curicó se celebraba la reparación de una calle luego de años de aventuras en ese asfalto digno de montaña rusa. Pero debemos mostrarnos agradecidos de la priorización. De igual forma, por la discriminación a peatones y ciclistas -de magnitudes teletónicas- o por las esporádicas indignaciones como las vistas frente a las fachadas sin fondo de Curepto… que por cierto siguen tal cual. Carretera de la costa sin terminar, todas las playas colapsadas en fin de semana, electricidad intermitente y un largo etcétera. ¿Crecimiento armónico? ¿Ayudar a las comunas históricamente discriminadas? Nada de eso, fortalezcamos el esquema, reforcemos los extremos: rásquense con sus propias uñas y el que pueda póngase a la fila para entrar a la mesa de poker.
Del Gobierno Regional y sus consejeros no podemos dar cifras. En el periodo que inicia será un desafío el de lograr eliminar esa opacidad, partiendo por transparentar las tablas de sesiones, transmitirlas online y disponer de indicadores para cada consejero. ¿O también querremos seguir manteniendo esto como directorio de empresa privada?. Disculpen, pero escribí esto suponiendo que no queremos volver a tropezar otra vez con la misma piedra.
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