Columna en Diario La Prensa de viernes 24 de mayo de 2019.
Podcast para Ahora es cuando / Radio Condell.
Parto por sincerar que, antes de escribir esto, pensé en las ofertas de demanda que han aparecido en las sesiones de concejo. Pero luego de recordar la introducción que hizo el alcalde al iniciar la cuenta pública, previo a los manifestantes, me motivé mucho.El reloj concitó la atención de quienes ni se acordaban del mentado objeto. Era atípico, minimal, contrastante con su vanguardia solar frente a los miles de años acumulados entre los demás objetos y árboles de la plaza. Al sacarlo sencillamente dejó de existir.
Pero no es lo único invisible.
Y es que el ojo se acostumbra.
No nos complica la mano de Lautaro, la quinta réplica forzada del Niño Taimado o la Ninfa derruida, porque también pasan a ser invisibles. Peor aún, ayer vimos que, por ejemplo, no nos complicaría sencillamente quitar y poner réplicas.
Espero no ser amenazado con demandas: el video está ahí.
No queda claro si la motivación de la búsqueda fue encontrar el reloj o evitar comentarios que afectaban a diputados en ejercicio. Lo que si queda claro, es la falta de noción temporal de los representantes actuales. Hay formas y formas de pasar a la historia y esta es una de las peores. Venimos perdiendo día a día patrimonio histórico que está ahí, frente a nuestros ojos, frente al propio municipio. Nos recuerda el aforismo que dice si quieres ocultar algo, ponlo donde todos lo vean. Cuando fundamos Curicopedia · org en 2011 este fue uno de los objetivos, volver a ver lo que tenemos al frente desde hace decenas, cientos de años incluso, un legado de los curicanos de ayer.
Por eso nos conmueve la visión de Balmaceda Fontecilla y su mirada de ciudad. Si hubiera alcanzado el tiempo no me cabe duda que concreta el hipódromo, el tranvía y la conexión con Buenos Aires, historias que desde luego debemos olvidar por la pulsión del presente. La telepolítica, la imagocracia, la instantaneidad así lo exige. La escenificación de ayer no se aleja de ello.
Diario La Prensa se limitó a exponer lo que está consignado en el acta y transmisión del espacio más abierto y público por definición: el concejo municipal. El diario de más de 120 años ha venido relatando la ciudad y este será un nuevo relato a lanzar a la posteridad. Nuevamente, la falta de sensibilidad temporal, les quita perspectiva a los representantes que persisten en seguir ciegos frente a la secuencia de hechos.
Sanz y Canquil, el primero con la difusión de la campaña y el segundo reabriendo la conversación acerca del Museo, dieron un poco de futuro.
Tener políticos del siglo XX intentando adaptarse al XXI, nos volverá a enfrentar a episodios plenamente olvidables como el del concejo pasado. La victimización era una herramienta usual de esa época. Ayer se sumó la violencia ya que, si en 2009 algunos ciudadanos formábamos parte de un nido de ratas, ayer merecieron garabatos en el prístino salón republicano, allí en ese ateneo de la democracia, donde hasta aletazos hemos visto.
Las redes sociales pueden convertirse en un notable capital, tanto para mejorar la ciudad como incluso una palanca política. Sabemos que lo saben y lo hacen. Las redes sociales son intensamente usadas por el municipio, el alcalde y los concejales. ¿Una simple foto actual del reloj en la bodega podría haber sido efectiva? A mi juicio si. Tuvieron todos los canales para comunicarlo, pero optaron por otro camino, ¿por qué?.
En los 80, un grupo llamado Los Prisioneros escribió una canción llamada “Lo estamos pasando muy bien”. Luego de ver la sesión completa y apreciar el estado de situación en su conjunto, considero que el título apropiado para este momento de la ciudad es “Lo están haciendo muy bien”.
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