El poder de la anticoncepción

Hace tiempo que me rondaban las ganas de escribir acerca del tema altamente candente que enfrenta desde hace tiempo al mercado del poder. Me hace sentido lo comentado por Celinda Letelier referente al papel de los partidos políticos en la conducción de la opinión. Existen círculos en los cuales el poder importa, pero en dentro de los partidos políticos la necesidad es agobiante clara y concreta. Votos son las monedas que se transan al momento de definir posturas claras en lo respectivo a los métodos de anticoncepción, aborto y planificación familiar, pero claro ‘que es lo mejor para Chile’ o ‘para nuestros hijos’ es la excusa.

Según Patricio Navia en referencia a la mención realizada por el Cardenal Errázuriz comenta “En lo que ya es una tradición de 18 de septiembre, el mensaje del Cardenal Errázuriz llamó a fortalecer la familia. Pero el líder católico no se atrevió a definir qué entiende por familia. Aunque idealmente debieran estar constituidas por una madre, un padre y sus hijos, la realidad de la mayoría de los hogares es diferente. Más de la mitad de los niños nacen fuera del matrimonio. Hay cientos de miles de familias uniparentales (incluida la de la Presidenta Bachelet) y millones de chilenos han vivido quiebres de parejas. Si la iglesia no adopta, en inequívocos términos, una definición más incluyente de familia, sus mensajes en defensa del “núcleo fundamental” simplemente serán desechados por una sociedad que vive realidades mucho más complejas. Adicionalmente, el Cardenal optó por criticar la planificación familiar. Desconociendo que los avances de la ciencia nos han dado mecanismos para que cada pareja decida si una relación sexual será para procrear o constituirá sólo un momento de placer, la iglesia se opone a la libertad de decidir cuándo tener hijos.“

condom think

Hay a lo menos dos preguntas que enfrentamos desde hace rato y que hacen que en cada elección se transe:

  • ¿Cuando comienza la vida?
  • ¿El acto sexual es para procrear solamente?
  • Ojo con la postura, no he mencionado a La Iglesia como opositora o a favor de algún tipo de argumentación, por que considero que dentro de este espacio ““político- es utilizada convenientemente para argumentar opiniones que de otro modo serían carentes de robustez o simplemente inatingentes.

    En lo personal, creo que la elección de algún método anticonceptivo es de decisión única e irrenunciable de quien lo decida, ya sea hombre o mujer, al igual que los métodos de anticoncepción de emergencia. El que alguno de los dos métodos sean o no abortivos creo que debe ser discutido por científicos y no por políticos ni sacerdotes que por diversos tipos de divisa intentarán argumentar posiciones favorables en la contingencia para una u otra posición. El criterio anterior también debería regir para los menores de 18, que también son entes sexuados y que si piensan que si/no quieren tener hijos es su decisión, en este punto es cuando comenzamos a caer en límites de edad, conciencia y decisión, ya que la madurez, conciencia u otro tipo de indicador es inútil al momento de definir edades de discernimiento.

    Como sea, llamo a que la velocidad del pensar sea mayor a la del habla, y que no nos dejemos guiar por antojadizos juicios de quienes buscan mayores divisas…

    Saludos!

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