Durante los últimos días he apreciado a través de los medios de comunicación, conversaciones con compañeros universitarios que recién ingresan este año, y también por compañeros de las demás federaciones agrupadas en Confech, una creciente inquietud ante los últimos sucesos relacionados con el crédito universitario y ayudas estudiantiles, esto acrecentado con la polémica suscitada por las diferencias numéricas enunciadas desde el gobierno.
Hagamos memoria. Martes 14 de septiembre de 2005, 9:00 AM, se firmaba el histórico acuerdo entre Confech (Organismo que agrupa a las federaciones de estudiantes de chile) y el Ministerio de Educación con Sergio Bitar a la cabeza, el que tenia entre sus puntos esenciales, el aseguramiento de la cobertura total de financiamiento a través de becas y crédito universitario para el arancel de referencia para los tres primeros quintiles de ingresos mas bajos (106.900 pesos per cápita)que obtengan sobre 475 puntos. Además asegura a cobertura del 90 al 20% de la cobertura dependiendo de la ubicación en los diferentes quintiles y deciles a medida del ascenso en ellos. Básicamente asegura la cobertura a quienes tengan capacidades académicas suficientes y recursos bajos (eso es grosso modo ya que el tocar temas como la validez de las mediciones de capacidades académicas, PSU, o de recursos, fichas varias, daría para muchas líneas más). El acuerdo era un avance, pero no era la solución a las problemáticas de financiamiento a la educación superior.
En este escenario, como es obvio, existen muchos beneficiados, los que deberían ir aumentando año tras año, y a su vez, muchos son los que por motivos “académicos” no logran superar la prueba impuesta para medir los conocimientos adquiridos teniendo que optar a otras vias.
Por cierto, año tras año la alternativa de la educación superior se ve alejada por motivos económicos, lo que a este año se le sumó la frustración de muchos jóvenes que aun esperanzaban ser uno de los beneficiados con los 40.000 nuevos créditos (con aval del estado) anunciados por S.E. Ricardo Lagos, los que por corrección de la actual ministra de educación Marigen Hornkohl, serán muchos menos. Lo que trae a colación pensamientos como cual habría sido la postura gubernamental ante este error, si esta situación se hubiera desarrollado en periodo de elecciones presidenciales. Pero dejando la suspicacia de lado, debemos ver que existe un par de problemas concretos y que no es primera vez que se presentan sino que es algo que se presenta año tras año.
Personalmente creo que es un problema de voluntad. Las autoridades gubernamentales y a veces las autoridades universitarias, comienzan a actuar luego de presiones estudiantiles, las que se expresan en muchas oportunidades en protestas, marchas, tomas y otro tipo de presiones con las que se consiguen posteriores negociaciones. ¿Por que no ejercer estas acciones sin mediar “motivaciones”a las autoridades? Año tras año en nuestro país cuando llueve se producen tremendas inundaciones, al igual que en este caso, se espera hasta último momento para hacerse cargo y hacer que los estudiantes nos preocupemos de lo central de la vida estudiantil: Estudiar.
¿Que nos depara el corto plazo? Como Presidente de una Federación de Estudiantes, escuchar las inquietudes de nuestros compañeros y ejercer acciones para satisfacer esas inquietudes ““ojalá- sin recurrir a las dinámicas que históricamente se han usado y, desde ambos sectores, encontrar puntos comunes para tomar acuerdos.
¿Qué nos depara el mediano plazo? Ejercer acciones por mejorar el sistema que actualmente esta en marcha, analizar como se desarrollan las instituciones acreditadas por la CNAP y el nuevo modelo de crédito con aval estatal, velar por que los acuerdos ligrados con el Ministerio de Educación se cumplan y tener conversaciones con las nuevas autoridades gubernamentales, las que, para pone un pelo mas en la sopa, asumirán recién el 11 de marzo, mes en que se acentúan todos los conflictos de carácter estudiantil: créditos, becas, pase escolar, etc.
¿Qué me gustaría que deparara el largo plazo? Tener políticas claras de desarrollo, al menos en el área de educación superior, una regulación efectiva de parte del ministerio tanto en calidad de contenidos y beneficios estudiantiles como en las carreras a impartir debido a la saturación de algunas de ellas o a la simple inutilidad de mas de alguna.
La educación es uno de los pilares en los que se fundan las sociedades. La educación es uno de los factores que puede hacer la diferencia entre ingresar al selecto grupo de los países desarrollados o quedarnos fuera. Por lo mismo, si aspiramos a un futuro próspero para nuestra nación, necesitamos hacer esfuerzos serios, con mentalidad de largo plazo, y con la participación de todos los actores, y no esperar a que llueva para tapar las goteras.-
Para finalizar, creo que tal como los estudiantes en nuestras evaluaciones vemos reflejados nuestros errores, a quien le ocurrió el “…error administrativo de carácter informático…” deberia reflejar alguna consecuencia, y no hablo solamente de despidos o enroques futuros, sino de una evaluación de como se esta desarrollando esta labor, que puede definir en más de un caso, el futuro de chilenos.
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una pura tontera de comentario… mi u estaba en paro cuando conocí al esposo-novio.. cuando me enojo responsabilizo a la usach de mi desgracia !!!
plop.