Lo que ves cuando ves…

He recibido un correo del Club de la Efectividad, del que me gustaría compartir una reflexión que considero digna de darle un par de vueltas.

“Imagine que está en el campo, en una hermosa noche sin luna. La ausencia de luces le permite maravillarse de la belleza del cielo. De repente, un extraño se acerca a usted y se presenta como un astrónomo. Comienzan a conversar y, poco a poco, esta persona le señala diferentes aspectos de los planetas y las constelaciones. Esta conversación le permite ver el cielo de manera diferente. Es el mismo cielo que al inicio, pero ahora usted ve cosas que antes no veía, aunque ya estaban allí. Esto hace que un cielo diferente se abra ante sus ojos. Usted es ahora capaz de observar el cielo de manera diferente.

Siguiendo con nuestro ejemplo, imagine ahora que en medio de la conversación con el astrónomo, aparece otra persona que se presenta como un astrólogo (que lugar tan concurrido!) y comienza a señalar nuevos aspectos del cielo que todos están mirando. Otra vez, nuevas cosas aparecen allí que previamente no se le habían revelado. Otra vez, usted se transformó en un observador diferente y fue capaz de observar un cielo diferente.”

“No vemos las cosas como ellas son,
Las vemos como somos nosotros”
El Talmud

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